eL suEñO

La percepcion casi extinguida y mi inconciencia mas consciente que nunca. Ella caminaba, era vida, era ella ... yo la miraba y todavia no podia comprender como habia logrado volver, como habia despertado de su letargo, como habia saltado ese monton de calas y coronas.
Mis lagrimas cesaban al mismo tiempo que ella balbuceaba. Ya no sabia que queria decir , era por primera vez pura lucidez. Toda la familia en un conjunto casi inmovil, no temia que pudiese desaparecer como algun dia lo hizo, sin dejar causa en claro. Pero como siendo ella su espiritu de libertad lejos de dejar ser perturvado queria refluir, como tantas veces quiso, como tan pocas pudo.
No le quite la vista de encima. Esperaba atravesar su brazo al palparlo, pero sin embargo encontre carne, fofa pero carne al fin. No me sorprendian sus palabras, no le sorprendia mi llanto.
- Es muy sensible ... siempre lo fue
Y mis lagrimas brotaban como chorro, pero la loca era yo, no ellos, aunque eran los que no entendian nada.
-Me quiero ir, ya es tarde. Yo me deprimo tanto cuando estoy sola en casa... No , no quiero entrar tarde, tampoco quiero quedarme mas tiempo aca, prefiero irme a casa, aunque alla este sola.
Estar en soledad no era de su agrado, pero la television y un par de visitas a la semana podria ayudarla a expresarse mas que entre el olor a gas de estufas y los revoques humedos.
- Bueno , anda nomas , mama
Y yo queria escupirla, como la iba a dejar ir de nuevo???, como no le pedia explicaciones a cambio?, por que ella no la lloraba como yo?, acaso yo sola veia la irrealidad? ... estaba viviendo la locura, como podia , pero la vivia.
Atraveso el ventanal que nisiquiera recuerdo si estaba abierto. La pollera de gasa comenzo a flotar y yo esperaba que desapareciera como un fantasma, pero al contrario, se elevo tal ascenso de Maria, con la gasa flotando, mirando al cielo, pura, libre, como ella queria, sin soledad, con perdones.
No atine a agarrarla, casi comprendia.
- Dicen que en el departamento se escucha musica muy fuerte (con cara de asombro y horror)
Y mientras ese grupo de extraños dejaban un cadaver como en una carrosa pero al descubierto, yo no podia evitar imaginar a mis abuelos festejando, festejando su eternidad.