Escurrirse

El solo hecho de imponerme el mismo camino de siempre, atarme el pañuelo en la cabeza; y caminar, descalza o en zapatillas (rojas, verdes, blancas, negras) suele causarme repugnancia. Esa simple y austera cantidad de cosas que hace que uno repita una y otra vez hasta cansarse y lograr fijar un concepto . Eso, lleva a que la gente lo vea mas alla de todo , mas aca, y en la nada.
Por ese motivo , entre otros tantos que deambulan y luchan antes de explotar en mi cerebro, me volvi a sentar a escribir. Ni para mi , ni para nadie. Ya mi objetivo mas preciso no es mas que un monton de basura enmarañada en algun rulo. Ya no le escribo al amor, porque lo conozco, lo veo , lo palpo, lo cojo. Ya no le escribo al olvido , porque me olvide como se escribia; ya no le escribo a las lagrimas porque borraron toda la tinta y cambiaron mis palabras. Ya no le escribo al perdon porque lo perdi y no lo encuentro -y tampoco me interesa encontrarlo-
Simpatica paradoja , habria que tener algun motivo explicito - llano - vago para poder escribir?; o simplemente el mero placer de resbalar los dedos sobre las teclas, y poder digerir de a poco lo que esta mente cansada al permanecer pocas horas bajo la calida muerte del sueño me deletrea?
Nunca fui tan precisa e indecisa ... pero mi placard sigue abierto , entre la oscuridad y a un costado de mi cama, para cuando el sudor frio toque mi cara y me lleven otra vez a donde vine.

Oh placido final de la coherencia!